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Sin importar el tamaño de tu empresa, el trabajo en equipo es un factor clave para mejorar los procesos y lograr la productividad que buscas. Sin embargo, la sinergia que necesitas formar entre tus colaboradores no es posible sin aplicar algunos cambios en tu oficina, esto va desde la forma en que se comunican hasta la inversión que realizas en la capacitación del personal.
Al principio puede ser abrumador y lo puedes ver como un gasto, pero te podemos asegurar que nunca te arrepentirás de invertir en el bienestar de tu equipo. Si logras hacer que los colaboradores se sientan apreciados y tengan una buena relación entre ellos, su eficiencia aumentará y hasta los encontrarás con mucha más iniciativa de su parte. Como consecuencia, no solo tendrás resultados en recursos humanos, también serán económicos.
Te compartimos algunas acciones que puedes ejecutar para que tu equipo de colaboradores empiece a trabajar en conjunto y te lleven a cumplir los objetivos de negocio deseados.
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Invierte en una herramienta de gestión de tareas
Esta opción tendrá resultados a corto plazo y mejorará la comunicación entre tus colaboradores y áreas. Se trata de tener una herramienta tecnológica que permita el intercambio de información entre equipos, sin mayores complicaciones y mejorando los flujos de trabajo.
Además, al tener una plataforma donde puedes monitorear las tareas de cada persona será más fácil medir el tiempo que le toma a cada colaborador terminar sus responsabilidades y así balancear la distribución de tareas. Esto promueve la transparencia entre áreas y la comunicación efectiva del equipo.
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Capacita a tus colaboradores
Al capacitarlos no solo agregas valor profesional para tu empresa, también es una forma de motivarlos y mostrar interés por su crecimiento dentro de la compañía. Esto aumentará la retención de colaboradores y hará que realicen un trabajo de mayor calidad para los clientes.
Estas capacitaciones pueden adaptarse a distintos presupuestos y necesidades de tu equipo. Puedes capacitarlos en uso de herramientas tecnológicas o en especializaciones según su área de trabajo. Sin importar lo que elijas, siempre será un valor agregado que puedes ofrecer como empresa.
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Plantea objetivos comunes
La sinergia solo se puede lograr si todos empiezan a trabajar por los mismos logros, esto no quiere decir que el área de ventas buscará cumplir los objetivos de marketing, pero deben compartir metas comunes para que haya mayor armonía entre lo que hace cada área. Es hacer que las áreas trabajen de la mano, cada una con independencia, pero sintiendo que se necesitan comunicar para cumplir los objetivos.
Cuando le das a dos grupos de personas una razón para aliarse, no tengas dudas que el trabajo en equipo se dará de forma natural y constructiva. Es necesario que tus colaboradores se miren como un “nosotros” y no como un “yo”.
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Reconoce los logros, no solo los fracasos
Un error común en las empresas es el de buscar culpables cuando hay un error, pero nunca celebrar y reconocer cuando se acierta. Este comportamiento solo debilita el trabajo en equipo y resulta en colaboradores con miedo, frustración y poca iniciativa. Por ello es necesario empezar a construir una cultura organizacional donde errar no sea el fin del mundo y cumplir metas sea motivo de celebración.
Un correo de felicitaciones o un pequeño detalle como brindar por el logro puede hacer la diferencia entre un equipo motivado y uno cansado. A las personas nos gusta ser reconocidas y que noten el resultado de nuestro esfuerzo, nos hace sentir importantes y valiosos en la compañía.
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Inclúyelos en las decisiones
Es muy importante que los colaboradores se sientan parte de la empresa y una forma de lograr esto es tomando en cuenta su opinión al momento de tomar decisiones. Esto no significa que debas consultar todo con el equipo, pero sí las decisiones donde ellos serán afectados o donde puedan aportar valor desde su área.
Por ejemplo, si vas a realizar una nueva contratación, las personas que estarán lidiando con el nuevo colaborador a diario deberían ser informados y consultados durante el proceso de elección. O si decides incorporar una nueva tecnología es adecuado presentar las opciones, razones y consecuencias al equipo, ya que serán ellos los que tengan que usarla en su rutina de trabajo.
Estas acciones puedes ejecutarlas sin presión y en periodos de tiempo adecuados, pero es muy importante que siempre mantengas una buena comunicación con cada uno de los colaboradores. Así puedes medir su percepción de la empresa y saber qué puedes hacer para mejorar su productividad.
